Hay un "aumento significativo" en el número de palestinos que están bajo detención administrativa en las cárceles israelíes, anunció ayer la Comisión de Asuntos de Detenidos y Exdetenidos.
La comisión dijo a la agencia de noticias Safa que el número de detenidos administrativos palestinos era "alrededor de 850", el "registro más alto desde la Intifada de 2015 en Jerusalén".
"La ocupación israelí utiliza este tipo de detención arbitraria como herramienta colectiva para castigar a los palestinos", añadió el comunicado.
Señalaba que los detenidos administrativos representaban "el 18 por ciento del total de prisioneros palestinos en las cárceles israelíes", y señalaba que el porcentaje "probablemente aumente ya que las autoridades israelíes registran más de 200 detenciones administrativas al mes".
La detención administrativa es un procedimiento que permite a la ocupación israelí retener indefinidamente a los presos sin cargos ni juicio durante periodos renovables de seis meses.