Han estallado enfrentamientos entre la policía paquistaní y partidarios del ex primer ministro Imran Khan ante su posible detención en la ciudad oriental de Lahore.
El martes, la policía disparó gases lacrimógenos y cañones de agua cuando cientos de miembros y simpatizantes del partido de Khan, Pakistan Tahreek-e-Insaf (PTI), se congregaron frente a su residencia de Zaman Park.
Imágenes de televisión mostraron a la policía acercándose a la residencia de Khan acompañada de un vehículo blindado. También se vio a partidarios de Khan lanzando piedras a la policía.
Syed Shehzad Nadeem Bukhari, un alto cargo de la policía de Islamabad, dijo a los periodistas que los agentes pretendían detener a Khan, de 70 años.
"Estamos aquí para cumplir la orden y detener a Imran Khan", declaró.
Minutos después, Khan publicó un mensaje de vídeo en Twitter, en el que decía que sus seguidores deberían luchar por sus derechos - "por la verdadera libertad"- si le detenían.
"La policía está aquí para enviarme a la cárcel, creen que si Imran Khan va a la cárcel, esta nación se dormirá. Hay que demostrarles que se equivocan", dice en el vídeo.
"Si me ocurre algo, si me envían a la cárcel o si me matan, tenéis que demostrar que también podéis luchar sin mí", dijo Khan.
La policía dijo anteriormente que se dirigía a casa de Khan para entregarle las dos órdenes de detención dictadas el lunes por un tribunal de Islamabad en casos de corrupción y "terrorismo".
Una de las órdenes se refiere a las supuestas amenazas de Khan a una jueza durante uno de sus discursos del año pasado. La otra se refiere a acusaciones de que Khan vendió regalos del Estado y ocultó activos mientras ocupaba el cargo de primer ministro, cargo que ocupó de 2018 a 2022.
Desde que perdió un voto de confianza en el Parlamento en abril, Khan ha exigido elecciones generales en mítines por todo el país. Ha dicho que los casos en su contra tienen motivaciones políticas.
Su sucesor, el primer ministro Shehbaz Sharif, ha rechazado la petición de Khan de celebrar elecciones anticipadas, previstas para finales de este año.
En declaraciones a la prensa a las puertas de la residencia de Khan, Shah Mahmood Qureshi, alto dirigente del PTI, afirmó que no hay justificación para que la policía ataque a la gente. "Estamos dispuestos a hablar", afirmó.
Qureshi dijo que quiere ver él mismo las órdenes de detención y que hablará con Khan cuando las vea.
"¿Qué quiere la policía?", preguntó. "Después de escuchar su punto de vista, me reuniré con Khan sahib. Puede que nosotros mismos estemos dispuestos a ser detenidos".
El lunes por la noche, Khan pronunció un gran mitin en Lahore como parte de la campaña para las elecciones provinciales de Punjab, previstas para el 30 de abril.
El partido de Khan ha expresado en repetidas ocasiones su preocupación por su seguridad después de que el ex primer ministro recibiera un disparo en la pierna durante un mitin en noviembre.
Desde entonces, ha permanecido en su residencia de Lahore, salvo una visita a Islamabad el mes pasado para comparecer ante un tribunal.
En una entrevista concedida a Al Jazeera la semana pasada, Khan declaró que su "vida está amenazada porque las personas que intentaron asesinarme están en el poder".
"La cuestión es cómo puedo hacer campaña en un entorno seguro ¿Cómo acudo a los tribunales? He comparecido tres veces ante los tribunales y, por desgracia, no había protección", afirmó.