Estados Unidos ha anunciado su última ronda de sanciones contra la producción iraní de aviones no tripulados y misiles, esta vez centrada en empresas y particulares que presuntamente adquirieron equipos para el programa de aviones no tripulados de Teherán.
En un comunicado emitido el martes, el Departamento del Tesoro de EE.UU. señaló que la "red de adquisiciones" en cuestión opera en nombre del Ministerio de Defensa y Logística de las Fuerzas Armadas de Irán (MODAFL), que supervisa a las empresas que participan en el desarrollo de vehículos aéreos no tripulados (UAV) y misiles balísticos.
Las últimas sanciones se produjeron mientras funcionarios estadounidenses seguían acusando a Irán de suministrar a Rusia aviones no tripulados para su invasión de Ucrania, que comenzó el 24 de febrero de 2022. La Unión Europea también ha apuntado a la industria de drones de Irán con sanciones.
"La bien documentada proliferación de vehículos aéreos no tripulados y armas convencionales de Irán a sus apoderados sigue socavando tanto la seguridad regional como la estabilidad mundial", dijo en un comunicado Brian Nelson, subsecretario de Terrorismo e Inteligencia Financiera del Tesoro de Estados Unidos.
"Estados Unidos seguirá desenmascarando las redes de adquisiciones extranjeras en cualquier jurisdicción que apoye el complejo industrial militar de Irán".
Entre los nombrados en las sanciones del martes figuran el Centro de Investigación Científica y Tecnológica de Defensa, con sede en Irán, su empresa de adquisiciones Farazan Industrial Engineering Inc y otras dos empresas, junto con agentes de compras de las compañías.
Entre los equipos adquiridos por la red había "motores de origen europeo" para vehículos aéreos no tripulados, según el comunicado.
Como consecuencia de las sanciones, a las entidades sancionadas se les denegará el acceso a cualquier propiedad o activo financiero estadounidense que tengan en el país. También se impedirá a las empresas estadounidenses hacer negocios con las identificadas.
Las sanciones son la última medida de Washington contra la fabricación de aviones no tripulados en Irán.
Recientemente, a principios de marzo, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó a una red de empresas chinas por adquirir equipos que apoyaban el programa de aviones no tripulados de Irán.
En enero, Washington también sancionó a siete personas que ocupaban puestos directivos en empresas iraníes que fabrican aviones no tripulados.
"Irán debe cesar su apoyo a la guerra de agresión no provocada de Rusia en Ucrania, y seguiremos utilizando todas las herramientas a nuestra disposición para interrumpir y retrasar estas transferencias e imponer costes a los actores implicados en esta actividad", dijo entonces en el comunicado el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
Estados Unidos ha acusado además a Teherán de violar el derecho internacional al no obtener la aprobación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para la venta de aviones no tripulados.
En febrero, funcionarios de defensa estadounidenses hicieron público un análisis que pretendía demostrar que Rusia estaba utilizando drones iraníes en Ucrania.
Por su parte, Irán ha mantenido una postura desafiante sobre la cuestión, afirmando que las críticas internacionales a su programa de aviones no tripulados tienen su origen en la preocupación de que se convierta en un competidor en la venta mundial de armas.
No obstante, Teherán afirmó que no ha proporcionado drones a Rusia para su uso en Ucrania más allá de "un número limitado" de los explosivos aéreos entregados a Moscú antes de la invasión.