Egipto está construyendo el Proyecto Nuevo Delta, que incluirá el mayor río artificial del mundo para suministrar el agua necesaria para cultivar casi 9.200 kilómetros cuadrados de tierra en el desierto occidental.


La importancia del proyecto ha sido discutida por el presidente egipcio Abdel Fattah Al-Sisi, que se reunió el domingo con el primer ministro, Mostafa Madbouly, junto con el ministro de Agricultura y Recuperación de Tierras, Alsayid Al-Qaseer, y el ministro de Recursos Hídricos e Irrigación, Hani Sweilem.


 Algunos oficiales superiores de las Fuerzas Armadas egipcias también participaron en la reunión para discutir la importancia del proyecto para la producción agrícola, la recuperación de tierras y el aumento de la superficie agrícola del Estado.


Durante la reunión, Al-Sisi subrayó la necesidad de coordinación entre todas las partes para completar el proyecto y utilizar sistemas de riego modernos en el marco de la política de racionalización del consumo de agua y de aumento de la eficacia de su gestión, informó el sitio web de noticias Sada Al-Balad.


El proyecto incluye unos 22 kilómetros de tuberías subterráneas que transportarán aguas subterráneas, aguas de drenaje agrícola y aguas superficiales tras ser tratadas en la Estación Hidráulica de Al-Hamam. El cauce abierto del río se extiende a lo largo de 92 kilómetros, y ya se ha completado el 35% de las obras de construcción de las tuberías de transporte de agua, así como el 65% de las obras de la zona abierta.