Un hombre egipcio se prendió fuego el sábado en la ciudad de Kafr El-Dawar, en el delta del Nilo, en protesta por la decisión de la escuela de su hijo de retener los libros de texto hasta que los pague. El hombre, identificado por los medios de comunicación locales sólo como "AM", se echó una sustancia en la ropa dentro de la escuela primaria por "los malos tratos de la directora del colegio y su negativa a entregar los libros de texto" a su hijo.
Tras las investigaciones preliminares, se informó de que varios miembros del personal lograron apagar el fuego y pudieron salvar al hombre antes de que fuera trasladado a un hospital. Se dice que se está recuperando de quemaduras leves.
La directora de la escuela ha sido suspendida por la administración educativa de la gobernación de Al-Beheira. También ha sido remitida a un comité disciplinario por infringir la directiva del Ministerio de Educación sobre la entrega de libros de texto a los alumnos, independientemente de que los paguen o no.
Al-Arabiya informó de que la esposa del hombre dijo que el motivo de la autoinmolación de su marido era el "maltrato" que recibía de la directora de la escuela. Alegó que fue golpeado por el personal de seguridad de la escuela, y que el expediente de su hijo ha sido extraviado por sus administradores. Añadió que, tras el incidente, un empleado de la escuela le entregó los libros de texto y que se habían pagado las tasas.
La autoinmolación es el último de una serie de incidentes violentos o mortales que han tenido lugar desde que comenzó el curso académico en Egipto el 2 de octubre. En un caso trágico, una alumna murió y otras 15 resultaron heridas tras el derrumbe de una escalera en la Escuela Preparatoria para Niñas Al-Mutamadiya, en la Dirección Educativa de Kerdasa, en la gobernación de Giza. Otra alumna de primaria murió tras caer desde el tercer piso en una escuela de Agouza, también en Giza, debido a lo que los funcionarios atribuyeron a "una estampida entre alumnos durante el recreo".