El rey de Marruecos está a favor del restablecimiento de los vínculos diplomáticos con Argelia.

Durante el tradicional discurso que marca el 22º aniversario de la subida al trono del rey, el sábado, Mohammed dijo que aspira a establecer con el presidente argelino Abdelmadjid Tebboune relaciones normales entre los “dos pueblos hermanos”.

“Subrayo una vez más que las fronteras que separan a los hermanos marroquíes y argelinos nunca serán barreras que impidan su interacción y entendimiento”, dijo el monarca.

Exhortó a los marroquíes a “preservar el espíritu de fraternidad, de solidaridad y de buena vecindad hacia nuestros hermanos argelinos” y describió a los dos países como algo más que vecinos.

“Consideramos la seguridad y la estabilidad de Argelia como parte de la seguridad y la estabilidad de Marruecos”, dijo Mohammed. “Lo que afecta a Marruecos también afectará a Argelia, porque son gemelos complementarios”

Marruecos y Argelia están enfrentados desde hace tiempo por el territorio disputado del Sáhara Occidental, donde el Frente Polisario, apoyado por Argel, busca la independencia del dominio de Rabat.

Argelia rompió sus relaciones diplomáticas con Marruecos en agosto de 2021, acusando a Rabat de “actos hostiles”.

La decisión fue “completamente injustificada”, dijo Rabat.

La frontera entre Argelia y Marruecos está cerrada desde 1994.

El disputado estatus del Sáhara Occidental -una antigua colonia española considerada “territorio no autónomo” por las Naciones Unidas- ha enfrentado a Marruecos con el Frente Polisario desde la década de 1970.

Rabat, que controla casi el 80 por ciento del territorio, presiona para que la autonomía esté bajo su soberanía.

El Frente Polisario, sin embargo, quiere un referéndum de autodeterminación patrocinado por la ONU.

La soberanía de Marruecos sobre el territorio fue respaldada por Washington en un acuerdo de 2020 en el que Rabat también normalizó sus relaciones con Israel.

Argelia, que apoya la causa palestina además del Frente, ha aprovechado la oportunidad para criticar la creciente cooperación militar de Marruecos con Israel, al que se refiere como la “entidad sionista”.

Refiriéndose a las “acusaciones de que los marroquíes insultan a Argelia y a los argelinos”, Mohammed dijo que eran obra de “individuos irresponsables que intentan sembrar la discordia”.

“Estas habladurías sobre las relaciones entre Marruecos y Argelia son totalmente insensatas y francamente espantosas”, añadió.

“No podremos hacer frente a los desafíos internos y externos sin consolidar la estabilidad social y fortalecer la economía”

El rey también aprovechó el discurso del sábado para prometer la reforma del código de la familia en favor de los derechos de la mujer, las protecciones sociales y el control de los precios en un momento de inflación creciente.

También se comprometió a redoblar los esfuerzos de vacunación para luchar contra el COVID-19, y agradeció al sector sanitario, a las fuerzas de seguridad y a las autoridades públicas la “dedicación y el espíritu de responsabilidad” que han demostrado durante la pandemia.

El rey reformista, de 58 años, gobierna Marruecos desde julio de 1999, cuando sucedió a su padre, Hassan II.