El ministro de Seguridad Nacional de Israel, el ultraderechista Itamar Ben-Gvir, amenazó el lunes con la pena de muerte en la silla eléctrica para los palestinos implicados en ataques contra israelíes.
"Cualquiera que asesine, dañe y masacre a civiles debe ser enviado a la silla eléctrica", dijo Ben-Gvir durante una reunión de su partido ultraderechista Fuerza Judía, citado por el Canal 13 israelí.
Ben-Gvir está presionando enérgicamente al parlamento israelí, la Knesset, para que apruebe un proyecto de ley para aplicar la pena de muerte a los palestinos implicados en ataques contra israelíes.
El ministro de extrema derecha también ha pedido que se imponga un toque de queda en los barrios palestinos que supongan una amenaza para Israel y que se detenga a quienes tengan armas.
El domingo, Ben-Gvir ordenó la demolición de 14 viviendas de propiedad palestina en la Jerusalén Este ocupada con el pretexto de la falta de permisos de construcción, según su oficina.
La tensión se ha recrudecido en los territorios palestinos en los últimos días en medio de una oleada de atentados.
El viernes, siete israelíes murieron en un tiroteo cerca de una sinagoga en la Jerusalén Oriental ocupada, un día después de que nueve palestinos murieran en una operación militar israelí en la ciudad cisjordana de Yenín.
Ben-Gvir tiene opiniones de extrema derecha sobre los palestinos y ha pedido su desplazamiento. En repetidas ocasiones se ha unido a colonos israelíes para asaltar el complejo de la mezquita de Al Aqsa, en Jerusalén Este.
El político de extrema derecha desencadenó una tormenta de condenas palestinas el 3 de enero, cuando visitó el lugar en medio de advertencias de disturbios.
En noviembre, el presidente israelí Isaac Herzog advirtió en un audio filtrado que "el mundo entero está preocupado" por las opiniones de extrema derecha de Ben-Gvir.