Al-Andalus, el término utilizado para describir la presencia musulmana en la Península Ibérica entre los siglos VIII y XV, dejó un legado cultural duradero en España. Durante estos siglos, los musulmanes, junto con los judíos y los cristianos, contribuyeron de manera significativa a la riqueza cultural de la región.
La arquitectura de Al-Andalus es una de las manifestaciones más evidentes de su legado cultural. Los monumentos más icónicos, como la Mezquita de Córdoba y la Alhambra en Granada, son testigos de la sofisticación y el ingenio de los arquitectos y artesanos musulmanes de la época. Además, la arquitectura mudéjar, un estilo que combina elementos musulmanes y cristianos, es una muestra de la influencia duradera de Al-Andalus en la arquitectura española.
La literatura también fue una parte importante de la cultura de Al-Andalus. Los escritores y poetas musulmanes produjeron obras en árabe que abarcaban una variedad de géneros, desde poesía lírica y épica hasta prosa religiosa y científica.
La música y la danza también tuvieron un papel importante en la cultura de Al-Andalus. La música andalusí, con sus raíces en la música árabe y beréber, es conocida por su riqueza melódica y su complejidad rítmica. La danza, conocida como “danza del vientre”, es una manifestación de la riqueza cultural de la región.