"Aquellos que queman libros acabarán quemando personas", han advertido las comunidades judía y musulmana de Suecia, citando al famoso autor judío-alemán Heinrich Heine, tras las recientes quemas del Corán, el libro sagrado de los musulmanes, informa la Agencia de Noticias Anadolu.
En referencia a la quema de libros en la Alemania nazi, el Consejo Oficial de Comunidades Judías Suecas y la Asociación Judeo Musulmana de Confianza AMANAH afirmaron el miércoles en un comunicado conjunto que la quema de libros suele indicar el comienzo de la normalización del odio hacia un grupo en la sociedad.
"Históricamente contra los judíos, ahora contra los musulmanes", decía la declaración, advirtiendo de que a los racistas y extremistas se les permite una vez más "abusar de la democracia y de la libertad de expresión para normalizar el odio contra una de las minorías religiosas de Suecia, quemando coranes".
Llamando la atención sobre la intensificación de los ataques contra judíos y musulmanes en el país, expresaron su preocupación.
"En una sociedad democrática, todo individuo tiene derecho a sentirse seguro y apreciado. Por la presente queremos expresar nuestro apoyo a la comunidad musulmana sueca y manifestar claramente que toda acción y signo de prejuicio y odio es inaceptable".
El sábado, el ultraderechista sueco-danés Rasmus Paludan quemó un ejemplar del Libro Sagrado musulmán en una protesta aprobada por la policía en la capital, Estocolmo.
Un día después, Edwin Wagensveld, político holandés de extrema derecha y líder del grupo islamófobo Pegida, arrancó páginas del Corán en La Haya, capital administrativa de Holanda. En un vídeo publicado en Twitter, Wagensveld mostró cómo quemaba las páginas arrancadas del Libro Sagrado en una sartén.