El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo, el viernes 3 de abril de 2020, que Turquía ha impuesto un toque de queda parcial a los ciudadanos menores de 20 años, que entrará en vigencia a partir de la medianoche del viernes, como parte de las medidas para combatir el brote del coronavirus.

Erdogan también agregó que Ankara también había decidido cerrar 31 ciudades a los vehículos, a excepción de los suministros vitales, como alimentos, medicamentos y productos para el cuidado de la salud, con el fin de contener el brote. Destacó durante una rueda de prensa que “cerrar las fronteras de las ciudades entrará en vigencia inicialmente por un período de 15 días, pero este período puede extenderse según sea necesario”.

El presidente turco declaró que el uso de máscaras sería obligatorio en lugares concurridos, transporte público, supermercados y lugares de trabajo, a partir del sábado. Hizo hincapié en que las reuniones en espacios abiertos, incluidas las calles, no deberían permitirse.

El Presidente señaló que alrededor de 304.000 personas e instituciones participaron en la campaña de solidaridad nacional para ayudar a las personas afectadas por el coronavirus. Sus donaciones ascendieron a 1.062.000.000 libras en el tercer día de su lanzamiento.

Con respecto al retorno de la vida a la normalidad, dijo: “su retorno en nuestra patria está en manos de 83 millones, y cuanto mejor sigamos las reglas, más control tendremos sobre el brote del virus y por consiguiente eliminarlo”.

El discurso del presidente turco se produjo después de un discurso del Ministro de Salud, Fakhruddin Koca, quien dijo que el número de muertes por coronavirus en Turquía aumentó a 425, mientras que el número de casos confirmados superó los 20.000.

Turquía suspendió todos los vuelos internacionales, impuso restricciones a los viajes nacionales, cerró escuelas, bares y cafeterías y suspendió las oraciones congregacionales para lidiar con el brote del coronavirus.

A fines de marzo, Turquía ordenó que las personas mayores de 65 años y las personas con enfermedades crónicas se quedaran en sus hogares.